Sin duda alguna, el Cambio Climático es el mayor riesgo socio-ambiental al que nos enfrentamos como especie. Seguramente has estado enterado por redes sociales, o directamente padecido, los efectos de fenómenos climáticos extremos de los últimos días en nuestro país: las ráfagas de viento en San Luis Potosí donde varios niños en una fiesta resultaron gravemente heridos, los tornados en Toluca, las inundaciones por lluvias atípicas en el sur de la CDMX, la tormenta tropical temprana en Oaxaca, el granizo del tamaño de pelotas de tenis que rompió los cristales de muchísimos autos en Chihuahua, el anuncio del gobierno federal reconociendo que la temporada de huracanes que se avecina viene fuerte.
La salida de Estados Unidos del Acuerdo de París significará que sólo Siria, Nicaragua y el mayor emisor de CO2 del planeta quedarán fuera. Pero es no es tan importante como saber que, a pesar de las decisiones políticas, muchos alcaldes de ciudades, gobernadores de estados y grandes corporaciones del país vecino han dicho públicamente que se mantendrán en seguimiento a los objetivos del acuerdo (Adobe, Apple, Facebook, GAP, Google, HP, Johnson Controls, Levi Strauss, Microsoft, PG&E, Unilever), y el resto del planeta está convencido de la urgente necesidad de actuar. Incluso personas, dirigentes de grandes empresas, que formaban parte de los consultores de Trump, han renunciado.¿Por qué? Porque estos gobiernos locales, corporaciones y personas están perfectamente conscientes del riesgo que representa el Cambio Climático en la operación de su negocio. Y su rentabilidad se verá afectada de manera directa.
El ver todas las reacciones, tanto de mandatarios internacionales, organizaciones mundiales, la negativa de renegociación me deja un rayo de esperanza: que surjan movimientos mucho más fuertes y objetivos de reducción mucho más ambiciosos. Que todos, incluidos tú y yo, caigamos en cuenta que somos parte del problema y, por lo tanto, somos también parte de la solución. Que la acción mundial crezca y se desborde a tal manera, que las reducciones del resto del mundo sobrepase las reducciones que había establecido originalmente Estados Unidos con Obama. Pero, más aún, la esperanza de que el país más contaminante en cuanto a emisiones de CO2 decida continuar en la lucha contra el cambio climático A PESAR de su presidente. Y dejando al lado del el hecho moral de trabajar en pro de la humanidad, ¡sabemos que tiene todo el sentido para las empresas hacerlo! Los riesgos para la operación bajan, se trabaja por la continuidad del negocio, las pólizas de seguros dejarán de subir; por donde se le vea…¡es rentable invertir en el combate al cambio climático!
Los grupos de interés están claramente de lado; no se les está considerando, y te digo que tú eres parte de esos grupos de interés. ¿Está todo perdido? ¡Por supuesto que no! Tú puedes hacer algo de manera inmediata por tus propios grupos de interés, para que la operación de tu empresa pueda continuar. Aquí nuestra propuesta de acción para el empresariado mexicano, como parte de su estrategia de sostenibilidad y de sus iniciativas de Responsabilidad Social Empresarial. El próximo Día Mundial del Medio Ambiente (5 de junio) representa una gran oportunidad para ser marcada como un hito en tu actuar: aprovecha la oportunidad casi inmediata de emprender acción por tus grupos de interés mientras que actúas para garantizar que tu empresa pueda continuar operando. Inventario de emisiones, soluciones de reducción y mitigación… permítenos ayudarte; tenemos las mejores herramientas y el personal más capacitado para hacerlo.
About the Author
Ana Lucía Guasque
Asociada de Punto Verde donde se desempeña como consultora para el diseño de estrategias de sosteniblidad empresarial y co-diseña la estrategia de capacitación en línea, Ana Lucía tiene más de 12 años de experiencia en sostenibilidad empresarial, con énfasis en establecimiento de metas, seguimiento de medidores ambientales, así como fijación de metas de reducción de huella de carbono a nivel corporativo. Cuenta con amplia experiencia trabajando con colaboradores para el cambio de actitudes socio-ambientales mediante la capacitación. Ha desarrollado proyectos de inventario de emisiones para medir la huella de carbono de eventos, desde el diseño del programa para llevar a cabo la medición hasta el diseño de las iniciativas de reducción y mitigación.