De algo sí debemos darle crédito al gobierno de la CDMX: en esta ocasión están haciendo mucho ruido en redes y en otros medios para que la población se entere, pero también tienen organizados los días de recolección de cada tipo de residuo.
No sé si recuerdas, pero cuando entró en vigor la norma anterior, por la que ahora tú y tu empresa separan los residuos en orgánicos e inorgánicos, no se tenía un calendario de recolección para cada tipo de residuos ni la infraestructura en los camiones de recolección para poder mantenerla separada. Sí han tenido avances, y como dicen por ahí, echando a perder se aprende.
Quiero partir de aquí con esta reflexión: ¿hemos aprendido, los capitalinos, de todas las veces que la hemos regado? Las lluvias atípicas de las últimas semanas han causado encharcamientos (palabritas que ya alucinamos) de magnitudes muy
importantes que han dejado daños severos no sólo en la infraestructura urbana sino también directamente a personas como tú y como yo. Casas inundadas, automóviles declarados pérdida total,… Y claro, podemos meternos en una discusión interminable y culpar por completo al gobierno de Mancera. Podemos decir que hacen un trabajo deficiente en la atención que debe ponerse en la red de drenaje, en los trabajos de desazolve. Seguramente continuará siendo plática de muchos cafés y de muchas conversaciones de escritorio el mal trabajo que hace el gobierno al respecto.
Yo me pregunto: ¿cuántas veces, en esas pláticas, se han llegado a mencionar las enormes cantidades de basura que siguen circulando por la ciudad y que, sin lugar a duda, no ayudan a que el agua de lluvia corra por el flujo destinado para dicho fin? ¿cuántas personas de las que siguen quejándose y creyendo que al hacerlo encontraron el hilo negro que podrá solucionar este problema tienen instalado un sistema de captación de agua pluvial que les permita reutilizar esta agua? ¿cuántas empresas, como la tuya o la nuestra, vio su rentabilidad afectada al tener que detener rutas de entrega o modificar horarios de trabajo por la falta de acceso de sus colaboradores?
Tu empresa aporta la organización y la oportunidad de generar educación y cambio de actitud…
Yo estoy convencida que esta nueva norma representa una OPORTUNIDAD: una oportunidad para hacer más rentable tu empresa. Sí. Sencillamente porque podrás identificar qué tipo de materiales son residuos para ti pero pueden ser insumos para alguien más. Economía circular. Sí, hay que hacer la investigación correspondiente; sí, tienes que dedicarle un rato a buscar en internet, en realizar llamadas telefónicas, en enviar correos electrónicos. Pero una vez que el proceso esté bien implementado, correrá automáticamente.
Ahora que, si no encuentras alguien que pueda aprovechar tus residuos, seguramente encontrarás alguien que los compre y podrás tener un ingreso por ellos. ¿Qué tal si, a partir de esta nueva norma, implementas un programa dentro de tu empresa que les permita a tus colaboradores tener ingresos a repartirse en partes iguales para todos esto es beneficioso para todos.
A partir de un adecuado programa de separación de residuos? Lo que tus colaboradores generen – principalmente residuos domésticos – puede venderse y obtener un ingreso para destinarse a un bien común, a la generación de más bienestar.
Tu empresa aporta la organización y la oportunidad de generar educación y cambio de actitud hacia los problemas de todos. Los colaboradores llevan esas prácticas a sus hogares y a otras empresas a través de sus amistades, pero también reciben el beneficio directo de la venta para reciclaje. Tu empresa también se beneficia ya que menor cantidad de basura estará tapando el drenaje de la ciudad y tu rentabilidad se tendrá que ver menos afectada necesariamente. Acción – reacción.
Claro que también tienes la opción de aprovechar el momento de preparar tu café, los minutos previos a las juntas o la hora de la comida para seguirte quejando, sin olvidar incluir en tus lamentos “nunca lo habíamos hecho así”, o esta otra que seguramente puede servirte para dicho propósito “el gobierno quiere que hagamos su trabajo”.
No nos equivoquemos: los residuos los genero yo, los generas tú, los genera tu empresa y su operación. Yo, tú y tu empresa somos responsables de generar el bienestar que queremos para todos. ¿Te vas a seguir quejando o vas a buscar la mejor manera para que el bienestar también llegue a ti? En Punto Verde SÍ le entramos.