Ha pasado un año más, casi todos festejamos anoche de muchas maneras diferentes. Se ha visto ya la pirotecnia de todo el mundo para celebrar este inicio de ciclo gregoriano. Sin embargo, las cosas parecen estar un poco desordenadas como afirma el comunicado de la ONU emitido por Antonio Guterres la víspera de este 2018. Lanza una alerta roja por tres temas importantes, violación a los derechos humanos, armas nucleares y cambio climático, aunque también mencionó los nacionalismos y la xenofobia. Temas que en su mayoría podrían parecer lejanos a la solución directa por los individuos que podamos estar leyendo esto, como quiera cada tema plantea una problemática que seguro nos resulta cercana o de plano inmediata.
¿Por qué ponernos a pensar en estas cosas en medio de días tan festivos? Creo que es importante poner en perspectiva la contribución que hacemos en nuestro hacer cotidiano para fortalecer o minimizar cada una de estas problemáticas. Para algunas es clarísimo, al cambio climático todos contribuíos solo por estar. Pero a la violación de los derechos humanos, la xenofobia y los nacionalismos ¿en qué medida y cómo lo hacemos? Realmente no quiero generar polémica solo una reflexión personal que nos lleve a ver de que manera aportamos a la situación presente.
Se lleva a cabo esta alerta roja como si la pesadilla de la guerra fría, tras una larga latencia, brotara de nuevo a un pico sin precedentes desde entonces, hasta ahora que llegó de nuevo un líder con la necesidad por demostrarse poderoso produciendo armamento nuclear y haciendo pruebas con los misiles.
¿cómo puede, nuestro modelo civilizatorio, contribuir a la reconciliación de tanta diferencia?
En la tregua después del a guerra fría el mundo parecía ya listo para ser conquistado por las diferencias, en una verdadera coexistencia racial, cuando de pronto broto también de nuevo el rencor hacia la otredad y con ello la xenofobia y la insurgencia nacionalista. ¿cómo podemos participar los seres humanos desde nuestra cotidianeidad para generar mejores condiciones sociales para todos? ¿será posible la globalización y la unidad de grandes bloques económicos al tiempo que las que las identidades nacionales con sus formas y costumbres son atendidas en cada localidad?
En el pasado cuando presento temas como estos en situaciones laborales, la reacción inmediata, es decir, pero si eso es responsabilidad de los gobiernos. Hoy sabemos que los gobiernos están rebasados, corrompidos y fuertemente influenciados por las oligarquías afinando en la política los intereses de pocos y convirtiéndolos así leyes y normativas para los muchos. Ante esta panorámica solo nos queda poner mucha atención y repensar cómo desde nuestro campo de acción podemos avanzar en las soluciones ya que el avance en cualquiera de los temas referidos impactará negativamente en todo el orbe.
Desde la trinchera del quehacer de Punto Verde podría ser evidente que tendremos una marcada tendencia por inclinarnos a profundizar en el tema del cambio climático, sin embargo, cada uno de los otros temas también lo impactan. Así que hoy mientras seguimos festejando y poco a poco nos hacemos a la idea del inminente regreso a la “normalidad” después de las fiestas, los dejamos pensando ¿ cómo puede, nuestro modelo civilizatorio, contribuir a la reconciliación de tanta diferencia?
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